jueves, 23 de febrero de 2012

No veo razón para cambiar de vida.

“Hubiera preferido no desagradarle,
pero no veía razón para cambiar de vida.
Pensándolo bien, no me sentía desgraciado.”
A. C., El Extranjero.


Me dicen como si fuera una ofensa
que no soy capaz de vivir de otra forma.

Insensatos.

No elegimos la forma de vivir
ni de morir
cuando queremos realmente
ser honestos.

Y es que a pesar de todo
soy honesto.

Y claro,
no tengo mucho más
de qué jactarme.

Así,
mi único camino
es no tener,
o perder lo que he tenido.

Y es que incluso la sangre,
en mi interior,
no me pertenece.

Todo está en mí
de paso.

Las cosas.

Los afectos.

Incluso el dolor
y la alegría.

Nada es para mí.

Nada vino para quedarse.

Todo es simplemente
señal de vida.

Y acepto esas señales.

Aunque nada, reitero,
quiero para mí.

A ustedes les dejo las palabras.

La carne queda para los buitres.

Pero el espíritu permitan
que lo gaste a diario.

Y es que no soy capaz de vivir
de otra forma.

Sé que no podría.

2 comentarios:

  1. permiteme que me quede entonces con la palabra
    " Vian" por que de entre todas es la que tiene
    color .
    Gracias

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