miércoles, 5 de febrero de 2014

Órale, Vian. / Déjame pensar un poco.



-¿Quihubo, Vian…? ¿Vas de cuete…?

-¿Tú…?

-Pos clariolas, Vian… rememore usted que íbamos con mi angustiosa en el gusano pa ya pal Chimirriate…

-¿Con quién?

-Con la angustiosa… con la venerable… ¿no se recuerda?

-¿Con su madre?

-Pos no te hagas… si hasta tomamos buen fuego en la cachimba…

-Ah… la señora Azucena…

-Pos claro… na más que ella se achantó primero y no vio lo que vimos…

-¿Se achantó?

-Claro… sí le hizo al buey apenas aparciamos…

-Sí… se durmió al tiro…

-Y nosotros en la uva… ¿se acuerda…? Y dele con tronarnos el petróleo… como pa colgarnos medallas…

-Sí, si me acuerdo… fue hace años eso sí…

-Adelántele esa parte eso sí… yo vine pa esclarecer otra cosa… eso que rifleamos después…

-¿Vino a desmenuzar la nube?

-No se haga, Vian… que hablo de a de veras… quiero saber si le hicimos al monje o era certeza que nos hablamos con un fiambre…

-¿Con el muerto?

-Eso mismo… ¿pasó eso o nos contamos una de vaqueros?

-Pasó. No recuerdo muy bien qué hablamos, pero pasó.

-¿Y cuál creencia tiene usted, güey…?

-¿Del muerto?

-Clarolas… ¿quién cree usted qui era y en qué patio andaba?

-¿En qué patio…?

-Si era emplumado o culifuego, digo yo…

-Ah… no sé… pero era tranquilo… parecía bueno, creo yo.

-Pero no se arranca uno del estuche pa ser bueno… ¿no cree?

-Pero quizá sí… Piénsalo sencillo: nos topamos con él… hablamos un poco… ¿eso fue todo, no?

-Nota.

-¿Le pasó algo a la señora Azucena?

-Le pasa vivir, no más, de hace añazos... No está pa zopilotes todavía…

-¿Y entonces?

-Quel rancio viene pal lado el catre y me tronan los huevos toda la noche…

-¿Tiene miedo, usted?

-De macho el miedo no más, pero le acepto el nombre pa que no peliemos…

-¿Y qué hace…? ¿Le pide hacer algo?

-Ahorita mismo la exigencia pasa por dibujos…

-¿Dibujos…? ¿De qué?

-De toíto… pero soy bueno pa la tierra y las piedras… de esos paisajes me hago…

-¿Y le quedan buenos?

-Quién iba a decir, pero la certeza es que sí… pero hay que ponerle historia debajo… A eso vine… sino son como mujer sin enagua… les falta algo…

-Pero piensa seguir siempre así, dibujando y pidiendo historias.

-Simposio.

-¿Y quieres que te ayude?

-Sinapsis.

-¿Y por qué debería hacerlo?

-Porque los zopilotes se achican si te ven en esto… y a ti te están haciendo nido en las hombreras…

-¿Y cómo supiste eso, se supone?

-La mandona.

-¿Te envió Azucena?

-Siniestro. Ella misma.

-¿Ella misma qué?

-No importa, Además repica falsario, todo eso...

-¿Qué cosa?

-Eso…

-…

-…

-¿Tienes qué decir algo más?

-El desgastado tiene tu cara, Vian…

-¿Mi cara?

-Así mismito, lo descubrí por feo…

-…

-Y usted no está pa zopilotes, Vian...

-Déjame pensar un poco... Espera. 

-Nadie está pa zopilotes...


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores

Archivo del blog

Datos personales