martes, 23 de mayo de 2017

Origen del cojín.

I.

A una princesa egipcia cuyo nombre no viene al caso se le atribuye la invención del cojín.

Se cuenta que esta princesa habría coleccionado plumas traídas de distintos lugares del mundo, y que estaba tan obsesionada con esta afición, que ofrecía placeres carnales a cada extranjero que le trajese una pluma que no tuviese en su colección.

De esta forma su colección fue creciendo hasta que su padre –un faraón cuyo nombre no queda establecido en los relatos antiguos-, se enteró de la situación y prometió darle 10 azotes por cada pluma que encontrase en su habitación.

Fue entonces que la princesa, asustada, buscó algunos sacos para guardas las plumas, y los selló a partir de una rápida costura.

Por último, para que su padre no los registrarse, fingió estar dormida en su habitación, apoyando su cuerpo y cabeza en esos sacos con plumas, para evitar que su padre pudiese registrarlos.


II

Otra variable de esta historia es la que señala que esta misma princesa habría coleccionaba aves extrañas, obtenidas tras los mismos procedimientos.

Por eso, y ante la inminente visita del su padre que había prometido azotarla si descubría estas aves, la princesa habría desplomado a todas las aves –que hasta entonces había mantenido en jaulas o en libertad restringida al interior de su pieza-, y habría guardado las plumas en unos sacos de tela, que selló con costuras.

Asimismo, había dejado huir a esas aves desplumadas diciendo que se trataba de extrañas ratas que habían entrado al palacio, posiblemente para llevar alguna peste, hasta la población.

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III.

Antes de dormir con cojines, se dormía sobre piedra.

Por esto, se decía que los sueños se originaban a partir del contacto de la piedra con el hombre.

Lamentablemente desde la invención del cojín se habría perdido esta tradición.

Puede que uno de estos días comencemos una especie de campaña por reponer la abolición del cojín y el reencuentro con esas antiguas tradiciones.

Habrá que perseguir un bien, como les decía, al menos en ese entonces.

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